Desde que nacemos hasta que morimos hemos tenido la facultad de percibir; cosas que no son de las que si, separar la realidad de algo que no será, a esto último lo llamamos ilusión, algo que prácticamente escapa de la realidad basándonos en nuestra esperanza de probabilidad, es decir, ¿que probabilidad hay de volar? como vemos ninguna, es por eso que volar pasa a ser una ilusión existente solo en nuestra mente.  El poder que ejercemos en este universo infinito llamado mente nos permite escapar de cierto modo a un mundo donde la realidad no existe confundiéndonos hasta cierto punto. Es por eso que sobrepasamos este nivel, explorando el ejemplo anterior sobre volar, si lo piensan detenidamente, en ciertas palabras podemos volar gracias a la tecnología, espero entiendan mi filosofía sobre realidad vs ilusión y lo confundido que trae a algunas personas en distintos ámbitos o etapas de la vida. 

Si ves esta publicación quiero que encajes el ámbito en el cual se encuentra mi predicamento sobre la realidad vs ilusión y me comentes el tuyo. 

Mi realidad sentimental 

Es importante conocer mas sobre uno mismo, saber tus virtudes y defectos, como también saber a que viene cada emoción que experimentas, si algo te agrada o desagrada, lo que te pone alterado o tranquilo, etc. 

Hoy por hoy me encuentro sin pareja, no me resulta importarme mucho ese aspecto, tengo amigos/as con quienes comparto momentos inmemorables que me ayudan a aprender, los valoro mucho y claro como toda persona soy capaz de sentir la magnitud de ser y estar con ellos. 

Ahora bien, ronda por mi vida una persona especial, la considero una amiga ya que nos conocimos en circunstancias difíciles para ella, al principio le di mi apoyo como buen samaritano que pasa por el camino de la vida (yo era su compañero de salón en la universidad) tiempo mas tarde congeniamos en ser buenos amigos, lo normal en toda amistad, salíamos a conversar y pasar el rato. 

Terminando el ciclo académico (enero del 2012) dejamos de frecuentarnos, no perdíamos la comunicación, he incluso, aunque ella siguió su camino en otra universidad acordábamos un día al mes para vernos, era bonito sentir ese tipo de amistad tan tranquila con una mujer. (En estos tiempos es difícil que un hombre sea amigo de una mujer).

Pasados ya 2 meses con la misma rutina, muy buena diría yo. Ella dejo de comunicarse conmigo, no respondía mis llamadas, mensajes, ni escritos por las redes sociales, decidí dejar ese asunto tal y como estaba. Hasta que un día yo por asares de la vida pasaba por un mal momento, inexplicablemente necesitaba a esa amiga a la que una vez acogí con mi cálido ser (aclarando que soy muy hosco en cuanto a recibir o dar muestras de amistad).

Ocurrió un malentendido y ambos resultamos peleando en una discusión donde nos decíamos nuestras "supuestas verdades", no se como decir esto: "Ella dejo de hablarme o yo deje de hablarle" tal vez se canso de contestarme o tuvo amistades mas interesantes que la mía y la dejo ahí, y yo por no pretender ser un tipo obsesivo no le hablé.   

Pasado ya seis meses sentía esa extraña necesidad de una buena conversación, disfrutar su abrazo cálido de saludo y pasar un buen momento de relajo, ese que solo quieres que suceda de forma especial. Trague todo tipo de mala intención que pensará tuviera sobre mi para ella y le pedí disculpas por el cruce de palabras fuertes que tuvimos en ese tiempo. Aceptó mis disculpas diciéndome que sentía que era especial para ella y que le daba curiosidad por saber de mi.

Verano del 2013, en ese entonces era un tipo relajado sentimentalmente hablando, digo, no tenia culpas ni me importaban tanto las personas, poniéndome en primer lugar ante todo, aclarando que no debo hacer daño al prójimo, por eso me alejo un poco de los demás en situaciones comprometedoras. 

Ya dejé de ser esa persona detallista, ha cambiado demasiado su forma de ser tan fría tratándome a la defensiva pero aun así sigue agradandome, tal vez crea poder revivir la esencia que llamó mi atención (un chico al cual difícilmente puedas sorprender). Así estuvimos, dejando de hablar por un año entero y luego viéndonos en persona, chateando de vez en cuando, ella siempre andaba ocupada por lo que las conversaciones eran cortas y simples, así lo sentía yo.

Ya en Diciembre del 2015 nos estamos comunicando mas seguido como grandes amigos, ese es un buen inicio y algo de poca trascendencia para mi pero inexplicablemente debería suceder. 


 

mi ILUSIÓN sentimental 

Esto trata mas de suposiciones estructuradas sobre su esencia al principio de nuestra amistad y su forma actual de ser, nunca le vi el físico, solo me agradaba su ser y como se sentía a mi lado. Ya para cuando la vida decide alejarla de mi y al vernos poco tiempo, fui por primera vez a su casa. Era una tarde fría, ese día nos dijimos todo lo que faltaba decirnos sin resentimiento y culpa, fue una conversación sin tapujos y rodeos, ya nos conocíamos bien como para saber que ninguno resultaría lastimado era ese motivo el cual nos llevo a tal conversación siento yo que fue un requisito indispensable conseguido con el tiempo. 

En serio hubo un tiempo en el que sentía que podía ser algo mas que un amigo para ella y por consiguiente pasaríamos tiempo indefinido juntos, pero como dicen por ahí, uno nunca sabe. 

Confieso que me ilusione mas por el hecho de sentir que por proceder, lo que quiero decir es que soy muy despistado para iniciar una relación o poco sé sobre como lograrlo, en fin solo soy yo mismo y al diablo con lo demás. 

Y no niego mis deseos de tener una relación con ella, tuve esos fuertes deseos y toda la pasión tanto así que decidí plasmar mis ilusos momentos en escritos de cada salida que tenia con ella, para la cual quizá fue solo un simple día pero para mi lo fue todo. Lo soñé ¿y que? No me siento culpable ni mucho menos un enfermo compulsivo, lo escribo ¿y que? Esa es mi manera de decirme a mi mismo como se que mis sentimientos son reales y que luchan con la ilusión. Vivo el día a día como los demás pero de vez en cuando quiero darme ese lujo de pensar en ella como si fuera la ultima persona que conociera en la tierra y conociéndome bien, lo haré hasta que encuentre algo o alguien de igual o mayor magnitud. 

mi realidad sentimental vs mi ILUSIÓN sentimental 
El temor de involucrar a una persona con mis sentimientos o incluso a confundir sentimiento con otras cosas hace que me sienta cohibido de proceder a algo como seducir a una mujer, yo nunca la seduje, solo fui yo mismo y espere a que me correspondiera por eso. Si me llegan a preguntar si la quiero o la amo o solo fue una simple ilusión, diría que la amo, aunque no me haya correspondido, aunque piensen que soy un idiota por sentir esas cosas pero si de esto resulta un tipo apasionado por escribir, uno que quiere vivir el día a día para estar feliz, quisiera seguir amándola. Aunque solo exista en mi cabeza esa posibilidad entonces me considero un creador, he creado una musa de mi vida, tiene nombre completo y lo digo de forma sana. No tengo nada malo en contra de nadie y siempre me cuestiono a mi mismo, esto crea pensamientos, me confundo por eso pero no me hago problemas pienso que es algo natural. No quiero que piensen que me enfoco solo en esto pero lo considero como un espacio que forma parte de mi esencia. Agradezco a la vida por haberla conocido y también por alejarla de mi y saber que no me corresponde, que fue solo una ilusión, un bonito sueño que ocupa mi mente, aprendí mucho estando a su lado y no sigo siendo el mismo tipo inmaduro si no que ahora estoy listo para iniciar una relación sana algún día con una buena mujer, la que yo elija para bien, una con la cual la ilusión y la realidad se lleven de la mano. Esta es la tregua que presento en la "REALIDAD VERSUS ILUSIÓN", mi conclusión es que de cierto modo aquello con lo que nos ilusionamos es real en cierta forma, la relación que existe entre realidad e ilusión es mas que una contrariedad, es un hecho lleno de procesos que solo el tiempo y uno mismo aprende. Hoy por hoy somos buenos amigos y tengo bien claro cual es la realidad, tengo una ilusión que ya no la involucra a ella si no a lo que pueda sentir cuando la persona que yo ame me corresponda.